jueves, 30 de septiembre de 2010

Foro Habitat Humano

En el marco de las celebraciones por los 80 años de reestablecimiento de la Javeriana, se organizó una serie de 5 foros bajo el título de "Entrevista al futuro de Colombia". El jueves representé a la Facultad de Ingeniería en el Foro centrado en Habitat Humano. La idea era presentar desde disinttas disciplinas el entendimiento de la problemática del habitat humano orientándolo a preguntas hacia el futuro. Las participaciones fueron desde Filosofía, Derecho, Economía y Medicina en mi sesión. La Arquitectura brilló por su ausencia. En términos generales a los profesores les preocupa el tema del habitat en cuanto a su relación con el liberalismo, el capitalismo, el (pos)modernismo, la ecología y los derechos (humanos). ¿Qué  tanto estamos dispuestos (u obligados) a revisar y comprometer nuevos contratos sociales en aras de poder continuar desarrollándonos de manera sostenible? es una vieja pregunta que sigue vigente.

La pregunta que orientó mi presentación fue la de si la relación de los humanos con el habitat es / debe ser una de adaptación o una de intervención. A diferencia de la mayoría de otras especies, el ser humano entra a un mundo inhóspito que en realidad es "inhabitable", por ello el ser humano es a veces igualado al ser técnico como una forma de intervenir el medio para hacerlo habitable. Esto bajo el precepto además de que los humanos buscamos bien-estar y no solo estar en el mundo (esta idea es de Ortega y Gassett). Sin embargo, los efectos nocivos de la industrialización llevaron a un movimiento ecológico que en la segunda mitad del siglo XX estuvo guiado en buena parte por la Teoría Gaia de James Lovelock. Aunque hoy en día dicha teoría es considerada seudo-científica y su autor un poco más gurú que biólogo, sigue influyendo el discurso ecológico actual. En resumidas cuentas, Gaia es la madre viva compuesta de sistemas autorreguladores (la temperatura, las mareas) que no son distintos de los mecanismso homeostáticos en otros organismos. Con esta idea se nos impulsa a adaptarnos a Gaia, de manera que no alteremos el equilibrio natural y que adquiramos conciencia de que nuestra vida está relacionada con todas las otras... que tal vez no somos más que bacterias o virus sobre la gran Gaia.  Más recientemente, el discurso ecológico ha estado dominado por el cambio climático. En este contexto, y en directa oposición a la hipótesis de Gaia, a surgido la hipótesis Medea que no ve a la tierra con ojos tan beningos. Propuesta por Peter Ward, esta hipótesis compara a la tierra con otro mito Griego en el que esta vez la madre devora a sus hijos. Usando ejemplos de eventos cataclísmicos que han borrado muchas especies en un corto período de tiempo, Ward ofrece la apocalíptica alternativa de que como sigamos así, nuestra señora madre acabará por aniquiliranos. La adaptación no es una opción. En este caso, lo único que podemos hacer es intervenir y radicalmente, con proyectos de orden geológico que sirvan para por ejemplo absorber CO2 en la tierra o en el mar, pero que con seguridad implican un nivel de compromiso e inversión global como nunca hemos visto en la historia. Yo opto por un medio punto dialéctico y respondo mi propia pregunta apuntando a una intervención adaptativa. Y como soy ingeniero y de sistemas, propongo que se haga a través de la ciencia basada en el diseño (design science) donde dichas intervenciones se adapten cíclicamente con plena conciencia de los efectos a largo plazo y los costos reales (es decir, ocultos) que tiene cualquier actividad económica. Esta intervención está basada en la solución de problemas entendida como el cambio de una situación actual en una deseada por medio de un artefacto (Herbert Simon dixit). Se me llamó la atención por exceso de pragmatismo luego en la discusión y se me recordó que en la universidad debe haber lugar también para preguntas impertinentes. Estoy de acuerdo, en parte. Pero no creo que sea un asunto de pertinencia en las preguntas. Para mí, es más un asunto de legitimidad. Debemos hacer preguntas legítimas (es decir, aquellas para que las que no conocemos la respuesta, como qué hacer para lidiar con el cambio climático). Pero donde no cedo es en la respuesta: esa sí debería ser pertinente. La advertencia sin embargo vale y es no caer en prácticas más cercanas a la consultoría o el diseño / ingeniería profesional en que se aplica conocimiento para mantener el status quo, y no tanto para cambiar el mundo.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Visita a Holanda

La semana pasada estuve en Holanda con propósitos académicos. La estadía fue corta pero me dio tiempo de visitar Maastricht, Delft y Amsterdam.

CRIWG2010, Maastricht
El motivo principal de mi viaje fue asistir a la conferencia CRIWG 2010 como organizador del consorcio doctoral previo a la conferencia. El taller estaba diseñado para que estudiantes doctorales interactuaran entre ellos y con profesores experimentados en el proceso de llevar a cabo un doctorado. Sirve como un espacio para presentar la propuesta o estado actual del proyecto doctoral y discutirlo con los demás en términos de contenido, pero también de aquellos aspectos recurrentes que preocupan a un estudiante doctoral: método, validación, posibilidades de publicación, y recomendaciones prácticas para manejar el tiempo, lidiar con el supervisor, mantener el equilibrio entre rigor y relevancia, etc. Yo no he dirijido ningún estudiante doctoral, así que mi labor fue de organización, coordinación y planeación, mientras que dos profesores senior contaban la experiencia necesaria. El grupo no era grande así que la interacción fue relativamente informal y la discusión muy enriquecedora para todos. Probablemente el que más aprendió con el taller fui yo.



El resto de la conferencia (en un fantástico castillo a las afueras de Maastricht) estuve libre para poder establecer contactos dentro de esta comunidad, cuyo interés primordial es la tecnología de apoyo a la colaboración. Esta área está muy emparentada con lo que se denomina CSCW y que originalmente hacía énfasis en tecnologías y sistemas de información para grupos (a diferencia de quellos orientados a un solo usuario). No obstante, y esto es algo que preocupa y motiva a la comunidad CRIWG, hoy es difícil pensar en aplicaciones para un solo usuario y la norma es casi que todos soporten de alguna manera el trabajao colaborativo. ¿Vale entonces la pena seguir con la temática explícita de sistemas colaborativos en un mundo en el que todos los sistemas son / deberían ser colaborativos?



En todo caso, la comunidad que se ha formado en torno a esta conferencia no es muy grande y es bastante estable. De hecho se origina con investigadores de Brasil, Chile y Protugal hace varios años, ofreciendo un puente entre las comunidades Latinoamericanas y las de Europa y EE.UU. Además, el formato de la conferencia es más cercano al de un taller ( no más de 50 o 60 personas) lo que brinda la oportunidad de tener solo una sesión ,una interacción más frecuente y estrecha con los demás participantes y un énfasis especial (el espíritu latino será) en las actividades sociales. Todo ello contribuye a que el taller sea productivo, pero divertido y a que las redes se fortalezcan mucho más que en una conferencia más grande. Y esto no implica inferior calidad, estuve bastante satisfecho con las contribuciones y me parece que hicieron un muy buen trabajo con los proceedings (con Springer LNCS) que incluso empiezan por explicar el origen, el aprendizaje y las tendecnais que se derivan de 16 conferencias CRIWG.


Para el Departamento de Ingeniería de Sistemas de la Javeriana ofrece un buen contexto para conectar parte del grupo de trabajo con quienes colaboré en Delft (Stephan Lukosch, Gwen Kolfschoten), sus contactos usuales en EE.UU. (Bob Briggs, Jay Nunamaker, G-J de Vreede, a quienes también conozco de varias conferencias) y los organizadores de CRIWG más cercanos a nosotros (Brasil, España, Chile, México).



Delft
Desafortunadamente, me perdí dos días de la conferencia CRIWG (en particular el jueves que era dedicado a pasea por Maastricht y sus viñedos... así es, en Holanda también hacen vino y con el cambio climático quizá en los países nórdicos esté el futuro del vino), pero el tiempo era corto y debía visitar mis antiguos compañeros en Delft, donde me quedé una noche.




Con Mamadou Seck hablamos de un proyecto en el que está trabajando con Gwen y Stpehan (antes mencionados) para simular procesos de colaboración. Él es experto en simulación y ellos en colaboración, pero lo que no tienen muy claro es como usar el modelo de simulación como una herramientas para desarrollar teoría. Allí entro yo: vamos a usar el modelo en que están trabajando como un caso de estudio para mi propio interés en elaborar precisamente el rol que tiene la simulación para desarollar teorías incipientes o extender teorías probadas dentro del contexto de la ciencia basada en el diseño (design science research).

También hablé con Frances Brazier quien dirige un grupo, IIDS, emparentado con nuestro SIDRE, cuyos orígenes se remontan a los sistemas distribuidos y la inteligencia artificial. Ahora trabajan en agentes y han desarrollado lo que se puede definir mejor como un sistema operativo para agentes (también efecto de su colboración durante mucho tiempo con Andy Tanenbaum en Amsterdam): AgentScape (de licencia BSD, también en la tradición Tanenbaumiana). Ahora quieren extender o sobreponer una capa de simulación y junto con ello una metodología para acompañar el proceso de desarrollo de simulaciones para agentes (entienden la simulación por ahora más como una emulación, por ejemplo con el objetivo de probar configuraciones de redes eléctricas de distribución dinámicamente ajustada).

También hablé con Joe Barjis. Realicé una charla para su curso de sistemas multi-actor enfocándome en los casos de estudio que realicé en el puerto de Rotterdam entrenándose para una emergencia. Además, Joe me invitó a participar en el comité del taller EOMAS que él organiza y en el cual he participado ya una vez.y que puede ser un buen destino para nuestras publicaciones (hacen un buen trabajo en los proceedings y la mayoría de artículos luego son invitados a ediciones especiales de revista). A propósito, le mencioné que ya tenemos algunos artículos de nuestro último Simposio de Construcción de Software y el paso a seguir sería escribir un correo informal (él lo hace cuando estemos listos) a alguno de sus contactos para proponer un special issue. Sin embargo, creo que necesitamos un Editor formalmente designado de nuestro lado si queremos que dicha revista salga eventualmente.


Con el director del departamento, Alexander Verbraeck, hablamos de otras oportunidades más generales de colabración entre Delft y la Javeriana. La primera opción son intercambios de estudiantes y profesores. De allá para acá hay varios estudiantes interesados en venir (4 a 6 meses), y aunque el Castellano suele ser un impedimento, lo que hay que pensar es bajo qué figura podemos hospedarlos (Práctica Profesional, Práctica Social y Proyecto Especial se me ocurren). Ya he tenido dos interesados que finalmente no pudieron venir y en el momento tengo dos más... De acá para allá depende del grado en el que estén y de si es para tomar materias o solo para relaizar pasantías de investigación. Si es por investigación, basta con que se demuestre la idoneidad del trabajo para alguno de los grupos en Delft y el compromiso de producir al menos un artículo conjunto y ellos ofrecen un lugar de trabajo, contactos para ayuda con vivienda y eventualmente un apoyo para pasajes (además de trabajar con ellos, lógicamente); el sostenimiento (a menos que haya un proyecto con financiación) tendría que correr por cuenta del estudiante.  En términos de profesores, más o menos lo mismo aplica, aunque también hay que buscar que en ambas vías se aproveche para dictar algún curso (o mejor, un módulo que da mayor felxibilidad y requiere menos tiempo).

Con mi ex-director de tesis, Henk Sol, hablamos de oportunidades para doctorados. Tantyo él como Alexander Verbraeck están dispuestos a dirigir proyectos de doctorado en la distancia. Las modalidades con múltiples, pero la más simple ni siquiera requiere que el candidato vaya a Holanda. Con contactos virtuales, visitas esporádicas y encuentros en conferencias ya se han graduado varios en el pasado. El título lo obtienen en Delft o en Groningen según el caso. Para quienes quieren obtener su título en la Javeriana, igual existe la opción de realizar una pasantía en Delft por 6 meses o un año, o varias visitas, siempre dependiendo de que haya intereses comunes y de que se solucione el tema financiero. En términos de doble titulación es el único caso donde habría que escalar el acuerdo e involucrar a decanos o incluso a Vicerrectoría. Tanto Sol como Verbraeck estan dispuestos a iniciar ese contacto, pero también convencidos de que será más fácil estbalecerlo una vez haya varias personas interesadas (no vale la pena hacerlo solo por un fulano).